
Para muchos artistas de la escuela antigua el acrílico es solo una copia plástica del óleo que no llega a imitarlo en todo su esplendor. La primera vez que me rebelé (o creí rebelarme), pinté pinceladas gruesas pero fugaces con acrílicos recién comprados y me sentí orgullosa de experimentar. Era una especie de abstracción envolvente con rojos, morados, azules y pinceladas acrílicas que resaltaban.

Las críticas no se hicieron esperar: Los profesores, que a la vez son mis jurados, me dijeron que el acrílico “te hace creer que sabes pintar, pero es solo una ilusión¨ y que ¨si realmente quieres aprender a pintar, se aprende con óleo¨. En fin, me dijeron varias cosas, pero la que más resonó en mi mente fue ¨un verdadero artista no pinta con acrílicos, pinta con óleo¨. Por todo ese semestre no toque mis nuevos acrílicos. Después de todo, ¿quién no quiere ser un verdadero artista?
Hoy sé que el material no hace al artista. En efecto, se puede pintar con absolutamente cualquier pigmento y aun así hacer algo increíble, así que vayamos al punto: ¿son los acrílicos como los mayoren dicen?¿Qué es el realmente el acrílico y de dónde se obtiene? ¿Son más o menos peligrosos que los óleos?

En 1800, con ayuda de la revolución industrial, se establecieron y vendieron tubos de óleo en masa, lo cual impulsó a mis queridos impresionistas a salir a pintar. No se habla mucho de eso, pero los óleos son derivados de óxidos, cobres, zinc y pigmentos naturales y podían llegar a ser realmente tóxicos para el sistema respiratorio, la piel y el sistema gastrointestinal. Sin ir muy lejos, hubo un verde, el verde esmeralda, también conocido como verde de Schweinfurt o verde París que intoxicaba de la tal manera el cuerpo humano que respirar o estar en contacto con él por tiempo prolongado podía ocasionar el deceso. Asimismo, contenía derivados de cobre y arsénico. Fue usado posteriormente, en 1880 como insecticida y controlador de plagas.
Además de la prevención de la salud, el artista buscaba algo que secara más rápido que el óleo. El acrílico se desarrolló como una alternativa a los óleos a inicios del siglo XX, así que se puede decir que son relativamente nuevos. Su composición está basada en polímero acrílico y pigmentos en polvo que son solubles al agua. Se desarrollo en Europa (Alemania desarrollaba resinas sintéticas) a la par que en Estados unidos y México.

En 1920 varios pintores muralistas mexicanos comenzaron a experimentar. Sobresale el artista David Alfaro Siqueiros. En el inicio de los años 40, Jackson Pollock, en ese momento estudiante de arte en New york, se inspiró y estudio las técnicas de Siqueiros. En 1955, aparecen los primeros acrílicos con base de agua a manos de Henry Levinson, fundador de la compa<ñía proveedora de materiales de arte Liquitex.
Originaria de Ohio en ese momento fue un Boom, se denominó a sí misma como ¨La casa de los acrílicos¨. En los 60s, ya se establece la viscosidad que actualmente tiene este pigmento y aparecen diferentes marcas como Winsor & Newton, Ámsterdam, Van Gogh, Golden, etc. Gracias a la existencia de más marcas alrededor del mundo fue posible un mayor acceso a este pigmento. No fue hasta finales de los 70s que llego al Perú.

Leí una frase a modo de mofa que decía: “ lo peor de los acrílicos es que secan rápido y lo mejor de los acrílicos es que secan rápido” y tiene razón, es su posibilidad de secar en minutos lo que atrae y desencanta a otros. Los óleos tardan no horas, sino días en oxidarse, a diferencia de ellos, el acrílico no necesita un médium.
Los acabados pueden asemejarse a la acuarela o al óleo. Este es una de las mayores propiedades que hacen atractivos a los acrílicos. Como tiene un pigmento muy concentrado se puede usar agua para disolverlo y dar un efecto más acuarelado. En el otro extremo, se puede empastar gruesas capas de acrílico con una espátula como si fuera óleo y secara mucho más rápido que este. Como el acrílico no trabaja por oxidación, no produce olores que perjudican el sistema respiratorio como el óleo y sus diluyentes. Además, se puede trabajar en lugares cerrados con acrílicos. Eso sí, una vez que el acrílico seca no es posible removerlo, pero sí pintar encima. Realmente no se sabe qué sucede con la pigmentación del acrílico al pasar tiempo, ya que lleva ¨pocos¨ año en el mercado del arte.

¿Qué hay más allá de la composición química, historia y propiedades?
El arte de crear y plasmar las ideas que uno tiene en el momento. Dar luz en automático y sin un proceso meticuloso o recurrente. Esto es lo que me atrapó de los acrílicos, debido a que podía ver mis retratos cobrar vida en un mismo día. ¡Lo vibrante que puede llegar a ser el color del acrílico puro!
Lo único que me desencanta del acrílico es que la pintura no fluye, tampoco se difumina, pero se crearon médium y retardantes especiales para eso, así que sería cuestión de experimentar. En resumen, el acrílico es un medio completamente sintético, un termoplástico hidrosoluble que ganó popularidad y aceptación por su posibilidad de transparencia o densidad y su increíble versatilidad.
Lo que dota de vida a la obra es la mano del pintor, no el medio. Las posibilidades son siempre infinitas y más ahora que tenemos a los acrílicos de nuestro lado.
LAWY MACASSI
Nació en Lima (1996) es una joven ex estudiante de la carrera de literatura, aspirante a actriz y actual estudiante de artes plásticas especializada en Pintura (PUCP). Ha dirigido, producido y actuado en dos cortometrajes (videoartes) ambos puntuados en el quinto superior de su salón y el último ¨Over The Line¨ elegido para la actual 80 exposición de Arte de la PUCP. Participó como extra en dos películas peruanas. Ambientalista y amante de la naturaleza, desde hace tres años ha estado en diferentes voluntariados como Orca, Clima de cambios, Fauna Forever, HAZla por tu playa entre otros. Sus pinturas han sido vendidas en distintas ferias artísticas de la escena contemporánea.Sus trabajos tanto en poesía como en pintura y medios audiovisuales exploran el amor, el desamor, el dolor y la locura; los monstruos que habitan entre nosotros y en nosotros.