Todo amante de la pintura sabe qué es un bodegón y de qué forma pintarlo. Así me lo dijo uno de mis más queridos profesores. Definitivamente, comprender el trasfondo de dicho ejercicio atemporal no resulta un proceso tan complicado como puede pensarse.
El primer libro de arte que me regalaron tenía como portada un bello bodegón de flores amarillas, pero era muy niña para saber eso. Hoy en día, bien lo sé. Para bien o para mal, llevo pintando bodegones desde hace más de tres años, ya que es uno de los ejercicios favoritos de los profesores para que aprendamos… pero ¿aprender qué?
El bodegón, también conocido como naturaleza muerta (En inglés ¨Still-Life¨) es una representación artística pictórica de varios elementos inertes en un espacio definido. Se le dice naturaleza muerta porque los objetos que son retratados no tienen vida. En la escuela clásica era usado como un ejercicio básico para que el estudiante pueda aprender a manejar el color, la forma y sobre todo la luz y composición. El artista o estudiante debe retratar los elementos de una manera consciente y planificada, ya que lo más importante del ejercicio es lograr una composición equilibrada.
La riqueza del color en los elementos también es importante. Por ejemplo, se debe diferenciar los amarillos fríos y verdosos de un limón con los amarillos cálidos y rojizos de un pimiento morrón. Suena cómico y tedioso, pero es verdad, habla la voz de la experiencia. Y no solo hay frutas y verduras en los bodegones, los elementos que pueden constituir un bodegón pueden llegar a ser muy variados: utensilios de mesa, utensilios de cocina, vasijas, ollas de barro, plantas, flores, libros, joyas, animales y hasta cráneos.
Las escuelas europeas son las que dieron origen al bodegón. Se originó en los Países Bajos. Fue acogido rápidamente en Alemania e Italia y se le trasladó a España, donde llegó a su apogeo. A finales del siglo XVI ya se había constituido como un género pictórico independiente. La España barroca es constantemente asociada con los mejores bodegones en la historia del arte. En esta época estaban pasando del Renacimiento al Barroco. Caravaggio fue un pintor italiano barroco que dominaba el claroscuro a la perfección. Él fue uno de los maestros antiguos de los bodegones. Dentro de los pintores españoles, tenemos a Juan Sánchez Cotán, Francisco de Zurbarán, Diego Velázquez y Francisco de Goya. En Holanda, destacan Abraham van Beyeren y Frans Snyders.
De igual manera, existen temáticas de bodegones. Mis favoritos son los de flores y ¿quiénes más increíbles para plasmar flores, plantas y naturaleza, que los impresionistas? Al igual que el Barroco, Romanticismo y las vanguardias, los impresionistas también supieron recrear sus propios bodegones y darles un carácter particular: dotaban a los elementos con vida propia y reflejaban la luminosidad o la oscuridad a través del color. Paul Cézanne, por ejemplo, usaba colores vívidos y sus cuadros eran armoniosos. También, estudiaba las figuras geométricas, pero se dejaba maravillar por la impresión del momento. Los Girasoles de Van Gogh tienen un mensaje fuerte detrás de él, muestran pinceladas estridentes e intensas, un fondo frio apastelado y una suave veladura de nostalgia que embriaga al cuadro. El amarillo, que era la mayor parte de la composición y el color de los girasoles tenía un significado especial para Vincent, debido a que estaba ligado a la vida y a la felicidad (ambos elementos que se le solían escapar de las manos). ¨Los girasoles¨ es una de las obras más conocidas del artista y a la vez una de mis primeras aproximaciones a la pintura durante mi infancia.
Miro mi bodegón y suspiro, ya que lo tengo al frente, pero se siente lejano: tres limones al medio, una remolacha a la izquierda, un pimiento rojo a la derecha, una vasija de cobre y un bidón de agua. He de decir que aun no lo entiendo. Recuerdo mis días de estudiante que aún no acaban y no lo comprendo. Mientras observo cómo pasan las semanas y pinto sin alcanzar la riqueza tradicional del ¨Still-Life¨. Cuando se reanuden las clases presenciales sé que volveré al taller a pintar bodegones y sé que pintaré bodegones por un par de años más. Tal vez lo que no veía era que al bodegón lo dotas con una parte de ti, al igual que el autorretrato. Es uno mismo quien le da el sentido y un mensaje a trasmitir.
Ya habrá tiempo para sentarse a solas a reflexionar con el bodegón y para descubrir sus misterios, pero hoy prefiero pintar rostros cálidos y humanos, esos que hoy me faltan y no puedo ver por la pandemia.
LAWY MACASSI
Nació en Lima (1996) es una joven ex estudiante de la carrera de literatura, aspirante a actriz y actual estudiante de artes plásticas especializada en Pintura (PUCP). Ha dirigido, producido y actuado en dos cortometrajes (videoartes) ambos puntuados en el quinto superior de su salón y el último ¨Over The Line¨ elegido para la actual 80 exposición de Arte de la PUCP. Participó como extra en dos películas peruanas. Ambientalista y amante de la naturaleza, desde hace tres años ha estado en diferentes voluntariados como Orca, Clima de cambios, Fauna Forever, HAZla por tu playa entre otros. Sus pinturas han sido vendidas en distintas ferias artísticas de la escena contemporánea.Sus trabajos tanto en poesía como en pintura y medios audiovisuales exploran el amor, el desamor, el dolor y la locura; los monstruos que habitan entre nosotros y en nosotros.