Tathi Puntriano demuestra que una mujer lo puede todo. A través del maquillaje, empodera a las personas y conecta con su hijo, quien heredó su pasión por las brochas.

Su llegada al mundo del maquillaje fue predecible desde pequeña. Pasó de jugar con las sombras antiguas de su mamá a maquillar a sus amigas para los clásicos quinceañeros y finalmente ser una makeup artist certificada en el extranjero. 

Pero el camino no fue fácil. Luchó contra la creencia de que el maquillaje es simplemente colocar colores y demostró a sus padres “que se podía vivir de esta profesión, que había que estudiar, practicar y hasta conocer la composición química de los productos”, comenta Tathi. Es así que poco a poco trabajaba para ahorrar y comprarse lo necesario para seguir creciendo como maquilladora. 

Ahora, con casi 20 años trabajando en shootings para grandes marcas y revistas, ha demostrado que es una mujer imparable. Para ella, lo que más le apasiona de su carrera es el efecto que puede tener en las personas. “Maquillar es un juego de luces y sombras maravilloso que puede generar mucho en la gente, hacerlas sentir más empoderadas y con una mejor autoestima”, afirma. 

Es por eso que también le encanta enseñar y dejar a sus clientas todas las herramientas para sacar provecho de su belleza natural sin contratar una maquilladora profesional todos los días. Además, rescata sus experiencias trabajando con personas con manchas u otras condiciones en la piel y la oportunidad que estas le brindan de enseñarles cómo usar “la varita mágica” cuando quieren verse distintas. 

Aunque es una amante del color, también es una firme creyente de que menos es más. Por eso, sus recomendaciones no buscan que adquieras mil productos que finalmente no vas a utilizar, sino que inviertas en lo realmente necesario. Para el cuidado de la piel, es imprescindible contar con un buen bloqueador, una crema hidratante y un contorno de ojos. Y en tu neceser de maquillaje no puede faltar una paleta de cuatro colores neutros, un delineador, y un rubor del color más adecuado para tu piel. En cuanto a los labiales, puedes tener dos, uno en tonos rosa o nude y otro más oscuro o vibrante para tus looks de noche más arriesgados. No olvides tomar en cuenta que las opciones mate pueden ser tus mejores aliadas en tiempos de mascarillas

Y esta pasión por el maquillaje no ha quedado solo en Tathi, sino que ha pasado a su hijo Fabrizio, quien es su principal asistente. Según cuenta, todo empezó cuando antes de saber escribir o dibujar pintaba a las modelos de las revistas y le preguntaba si podía ayudarla a retocar su maquillaje. Tras ver su talento innato, “poco a poco lo fui dejando estar en mis clases, ayudándome a pasar las brochas, el algodón, asistiendo en shootings”, reconoce Tathi. Es así que, con solo quince años, Fabrizio ya es un maquillador profesional certificado en Chile, demostrando que “ya es tiempo de dejar de lado los estereotipos” y que el mundo de la belleza es para todos

Otra cosa que comparten juntos Tathi y Fabrizio es el deporte. Al inicio de la pandemia, Tathi se decidió a salir a correr, primero por una cuestión física, pero luego empezó a enamorarse del trail-running. “Ya mi cuerpo me pedía correr y prefería comprarme unas zapatillas en vez de un par de tacos”, confiesa. Corriendo más de 21 kilómetros, ahora están súper motivados preparándose para su primera maratón. 

Si te estás preguntando cómo hacer todo esto sin morir en el intento, la respuesta está en la frase “sin miedo al éxito”. “Siempre y cuando todas las actividades te gusten y te apasionen, todo se va alineando”, comenta Tathi. ¿Qué esperas para probar tu versatilidad?

Escribe: Lucía Mayandía (@lucia.mayandia01)