¿Cuál es la mejor manera de recibir el invierno? Disfrutar de una buena sopa es una alternativa viable. Por ello, te traemos la mejor ruta para salir de la rutina y  calentar la temporada más fría del año; además de otras recomendaciones imprescindibles.

Fotografía: Fiorella Gómez

Las tenemos de pollo, carne, cordero, vegetales, mariscos y un sinfín de variedades. A la hora de construir una sopa, el equilibrio de los sabores es clave. En este cambio de temporada, es probable que en nuestras mesas desfilen clásicos criollos. . Sin embargo, en este artículo no encontraremos nada de ello, sino un viaje culinario que se sirve en tazón y nos invita a disfrutar la cocina internacional.

SUSHI ITO Y LIMA THAI

Fotografía: Fiorella Gómez

A raíz de la pandemia, Lima Thai se mudó al local de Sushi Ito en el C.C. El Polo en Santiago de Surco, donde ambos unen lo mejor de la cocina japonesa y tailandesa en un mismo espacio. Dirigidas por Roger Arakaki, nos presentaron sus mejores sopas. Por el lado nikkei, Sushi Ito tiene en su carta el ramen más sabroso y contundente que haya probado. La base del caldo es el shoyu y se sirve caliente en un tazón acompañado de fideos, hongos shiitake, frejolito chino, un huevo duro y panceta de cerdo en salsa teriyaki. Ello no es todo, pues también podremos encontrar el «Ramen Gyoza», que alberga un adicional imperdible: las gyozas crocantes.

Fotografía: Fiorella Gómez

Al revés de la carta nos espera la selección de platillos de Lima Thai, con una sopa «Tom Yan Goong» que está para chuparse los dedos. Una sopa preparada con caldo de langostinos, leche de coco, kion, hojas de lima y ají limo morroneado para darle el toque criollo. Es picante y se sirve al gusto del comensal. La introducción perfecta para descubrir las bondades de la cocina tailandesa. Si te queda antojo de algún dulce, la opción perfecta son las «Amai Gyozas», unas empanaditas dulces y espolvoreadas con azúcar en polvo que, en su interior, llevan manjar blanco y coco.

MASSALA

Esta ruta no estaría completa sin el festival que nos ofrece la gastronomía hindú. En Massala todo se viste de color y aromas inexplorados gracias a Akki Rawat, chef originario de la India que trabaja de la mano con Ravi Krishna, propietario del restaurante. La base de la cocina India es la comida de olla al igual que su amplia gama de especias, responsables de atribuirle misteriosos aromas, colores y sabores.

Fotografía: Fiorella Gómez

Es así que las shorbas indias destacan por su calidez y un olor ahumado característico del tradicional horno de barro llamado «tandoor». La shorba de verduras tiene como base la cúrcuma fresca y se disfruta caliente. Contiene zanahoria, brócoli, coliflor, entre otros ingredientes; pero va mucho más allá que el caldo de verduras convencional. Su sabor es fresco e intenso. Ideal si buscas algo ligero sin perder una buena sazón.

Si tu sopa no está completa sin un poco de proteína, la shorba de carne y la de pollo son para ti. La primera es un caldo cremoso. Su fondo es el caldo de carne y kion, sin embargo, se complementa con una pasta hecha de cilantro y menta que le otorga el característico color verdoso. El plato incluye «garam masala», una mezcla de especias de la India que aporta matices dulces, picantes e incluso florales.

La última es «Mulling de pollo», una shorba preparada con base de tomate, paprika y caldo de pollo al que se le añade la leche de coco. Un plato reconfortante y cálido que se acompaña de unos onion rings al estilo indio, rebozados en harina de garbanzos. Cuando sumergimos el acompañamiento en el caldo, el sabor que adquieren es de otro mundo. Todo ello estará disponible en su carta de invierno, listos para conquistar nuestro estómago y corazón.

Fotografía: Fiorella Gómez

También hay opciones al «tandoor» como el «Chicken Tikka 3 colores», un plato «sizzler» que llega chisporroteando a la mesa. En cada porción encontrarás pollo al horno marinado y aderezado con tres tipos de curry: rojo, amarillo, verde. Advierto que las papas de acompañamiento son realmente adictivas. Para las bebidas, el vino caliente es el favorito de los comensales. Contiene vino tinto que se hierve con manzana y canela. Te aseguro de que no querrás beber otra cosa durante el invierno.

SHIZEN

No podíamos terminar sin ese platillo extra. Aunque la sopa ramen es espectacular, la gastronomía japonesa puede ofrecernos más opciones para calentarnos en la temporada que se avecina. Ese es el caso del «Udon y Uchucuta», un plato contundente y excepcional que expresa el lado más atrevido de la cocina nikkei. Para los que no lo conocen, el «udon» es una pasta gruesa y blanca que se elabora a base de harina de trigo. Su principal característica es que absorbe muy bien todos los sabores de la comida, dándonos como resultado un fideo que permite disfrutar al máximo de una sopa o cualquier platillo en el que se sirva.

El «udon» de Shizen viene en su versión «Uchucuta» y «Sambal». La primera contiene un aderezo de rocoto, batayaki y mariscos salteados en sake. Entre ellos podemos encontrar conchas blancas, langostinos y pota en su punto de cocción adecuado. En la segunda presentación, el «udon» se acompaña de un sambal de ajíes peruanos, vegetales al wok y delicados cortes de lomo de ternera. La inspiración es trabajada por los tres socios: Renato Kanashiro, Coco Tomita y Mayra Flores, quienes hacen bombear el corazón del restaurante con su creatividad y pasión por la gastronomía.

Escribe: Fiorella Gómez (@fgmontufar_)