Declarado Patrimonio Cultural de la Nación, Rúpac es un santuario que debes visitar si deseas escapar de la rutina durante un fin de semana.

Rúpac es un centro arqueológico que pertenece a la cultura de los Atavillos y fue construido en el año 1200 d.C aproximadamente. Cuenta con estructuras de hasta tres pisos, edificadas en la cima de una montaña y fabricadas a base de piedra. Estas torres, denominadas «Kullpis», servían como puestos de vigilancia militar y necrópolis, pudiendo encontrar hasta el día de hoy restos humanos (huesos y cráneos). En el año 1470, el imperio Inca conquistó estas tierras y se volvieron de su propiedad. Tiempo después llegaron los españoles. El terreno sufrió el abandono de sus pobladores y una notable deterioración que se evidencia en la actualidad.

Se encuentra ubicado en el distrito de Atavillos Bajo en Huaral, a dos horas al norte de Lima. En este destino podrás apreciar la majestuosa ciudadela preincaica, la cual es conocida como el Choquequirao limeño. Además, será posible conocer el famoso colchón de nubes si vas entre diciembre y abril, siendo mayo la mejor época para observar los atardeceres color fuego. Así que, si eres fanático del trekking, acampar y las aventuras; esta atracción turística es ideal para ti. Aquí te contamos todo lo que debes tomar en cuenta antes de visitarla.

Para poder llegar a Rúpac se debe abordar un bus desde el terminal Plaza Norte con dirección a Huaral; el cual sale cada 20 minutos y no necesita una reservación previa. El precio es, en promedio, de diez soles; aunque este puede variar por días festivos. Por otro lado, en carro particular tendrás que ir rumbo a la autopista de la Panamericana Norte. El tiempo de ida en esta última modalidad será de solo una hora y media aproximadamente. Asimismo, es recomendable salir entre las 4 y las 5 de la madrugada para evitar el tráfico y ejecutar la travesía sin apuros.

Ni bien llegues a Huaral tendrás que dirigirte al paradero de los carros que van rumbo a Rúpac, ubicado en la intersección de las avenidas Los Naturales y García Alonso. Ahí, abordarás un colectivo por solo 30 soles (en promedio). Este transporte está disponible desde las 4 de la mañana, y cuenta con dos paradas. La primera es en La Florida, después de una hora y media. Aquí se adquirirá el ticket de ingreso a Rúpac. 45 minutos después, llegarás a Las Pampas, la cual es conocida como la «Ciudad Fantasma»; ya que los habitantes abandonaron sus casas para mudarse a La Florida. Sin embargo, quedan algunas tiendas y restaurantes que servirán para reponer tus energías antes del excitante trayecto. Será el último tramo en carro, pues lo que sigue se recorrerá a pie.

Después de un buen desayuno en la ciudad, comenzará la caminata al Mirador Rúpac. Son 7.3 kilómetros de trekking hasta el centro arqueológico, y durará tres horas dependiendo del estado físico en el que te encuentres. El recorrido tiene unas vistas increíbles, está rodeado de naturaleza y lleno de adrenalina. Al llegar a la cima, podrás dirigirte a visitar las ruinas o descansar en la zona de campings, y recorrerlas al día siguiente con tranquilidad.

En lo posible debes llevar ropa ligera, cortavientos, mucha agua y algunos snacks, ya que, si bien hay vendedores en el mismo mirador, los precios se incrementan y es mejor prevenir. Utilizar zapatos deportivos para poder culminar la caminata de manera satisfactoria también es indispensable. Por último, es importante seguir las instrucciones a fin de proteger este destino turístico.

Entre ellas está el hecho de no hacer fogatas ni acampar dentro de la zona arqueológica, porque hay sitios específicos para estas actividades donde no se dañan las construcciones. Asimismo, no realizar excavaciones o remociones de las evidencias arqueológicas existentes en el suelo y en el subsuelo, ni realizar inscripciones de cualquier tipo en los muros y las piedras. Ya lo sabes. Te esperan fotos espectaculares y unas vistas de película a pocas horas de la capital. La «Ciudad de Fuego» debe ser tu próximo destino.

Escribe: Natalia Grey (@nataliagb123)