Como si la piedra esculpida aspirara al aliento de los desaparecidos. Entre lo representado y su representación hay una transferencia del alma. Ésta no es una simple metáfora de piedra del desaparecido, sino una metonimia real, una prolongación sublimada pero todavía física de su carne.

Régis Debray

La ciudad del Qosqo es en sí misma un Apu Rimaq[1], para quien sabe escucharla. En este lugar la magia habita cada espacio de sus apretadas callejuelas pétreas. Por algo es el nuevo centro magnético de la Tierra, en reemplazo del Tíbet.

Desde fines de los 60, los devotos de la International Society for Krishna Conciencie o ISKCON, una rama de la Gaudiya Mata Sampradaya fundada en Nueva York por su Divina Gracia Srila Prabhupadha, llegaron a Cusco para otorgar la liberación de la rueda del Karma a las almas de los hippies, mediante la rítmica recitación de sus potentes mantras salvíficos. Una vez instalados, grande fue su sorpresa al comprobar que existía un vestigio de lo que para ellos podría haber sido la prueba de que el Señor Ramacandra, un avatar (encarnación) de Krishna, estuvo en Cusco durante la pelea que hace miles de años sostuvo con el demonio Rávana, por el rapto de su esposa, llamada Sita. Lo acompañó su fiel sirviente Hanuman, el rey de los monos. La “prueba” es la huella que dejó en una piedra que aún se conserva en la plaza de Huchu´y Rímacpampa, en la calle Abracitos, bajando de la calle del templo de Santo Domingo. Según la historia “oficial”, fue hallada en la calle Santa Catalina, en casa de la familia Ferro.

Cierta o no la versión mística, pues los cusqueños aseguran se trata de la huella de un puma, caló hondo en los monjes Hare Krishna, que no dudan en contársela a cuanto visitante llegue a su templo. Al preguntarles sobre el Sastra (escritura) que corroboraba tal versión, recurrieron a la otra fuente de certeza propia de su tradición, es decir el Sadhu (hombre santo) o Gurú. Me comentaron que Atulananda Swami daba fe de que la huella era fidedigna. La primera pregunta sería saber ¿cómo llegó hasta allí?

Para intentar una explicación, debemos recurrir a la historia misma de El Ramayana, uno de los primeros poemas épicos de la humanidad, escrito, al parecer, por el sabio Valmiki, otra encarnación plenaria de Krishna, que narra las aventuras de Rama, su hermano Lakshman y el fiel Hanuman. En el libro, al menos en la edición que tengo, no aparece esa información. Sin embargo, existen en la web otras versiones en las que sí se menciona a la ciudad del Cusco, como en el Canto IV del Kishkindha Kanda, (Ramayana) El Libro del Reino de los Simios.

“Habiendo despedido a Lakshman, Sri Rama empachado de agonía y desconsuelo habló a los brahmanes, consejeros y ciudadanos: “Consagraré a Bharat como Señor de Ayodhya hoy mismo y partiré al bosque en retiro espiritual. Que todo lo necesario sea hecho sin demora, pues seguiré el sendero que Lakshman ha trazado para Mí”. Prestando oídos a estas palabras que llegaban como afilados dardos, todos los súbitos cayeron postrados como si no tuvieran ya más vida. Bharat, también presente, estaba casi inconsciente escuchando las palabras del descendiente de Raghu y pronunció: “Juro por la verdad y los disfrutes celestiales, ¡Oh Rama! que no deseo un reino sin ti. ¡Oh Rey! Consagra a Kush en el territorio del Sur de Koshala y a Lav en el territorio superior, que los mensajeros avisen sin demora a Satrughna de las noticias de nuestra partida”.”[2]

El pie de página menciona que:

“Se refiere al hemisferio Sur, específicamente a Sudamérica, con capital conocida como Cuzco (Kush-ko)”.

¿Existía una conexión entre la milenaria India y el reino de los incas? Incluso, algunos devotos me han comentado acerca de un “túnel” místico que uniría a la antigua India védica con el Cusco. Aquí se mezclan varios mitos como el de la tierra hueca, alumbrada por el sol esmeralda.

Sin embargo, y lo importante es que resultaría muy útil repensar el papel que han jugado y juega la tradición, el mito urbano, en la construcción identitaria y como mecanismo de rescate de la memoria colectiva, sobre todo popular, los registros considerados como subalternos, el “decir” cotidiano, el chisme, lo “oído por allí”. Es decir, la Voz, el color local. Tales elementos, continúan presentes en el tejido social y lo conforman.

Podemos creer que la huella de Huchu´y Rímacpampa es la de un puma o la del señor Hanuman, lo cierto es que la Ciudad Imperial nunca no deja de sorprendernos e incluso podríamos preguntar imitando al personaje de Morfeo en Matrix: ¿Qué es lo real?

Francisco León.

FRANCISCO LEÓN

Nació en Lima el 8 de mayo de 1975. Escritor, poeta, editor, historiador, músico. Cursó estudios de literatura en la UBA (Universidad de Buenos Aires). Promotor cultural. Publica  la novela corta Resplandor Púrpura (Grupo Editorial RAS, Lima, 2004). El año 2005 obtiene mención honrosa a nivel nacional en el concurso de Poesía Iberoamericano, Cuento y Dramaturgia 500VL, organizado por el Boulevard de la Cultura de Quilca y la Municipalidad de Lima. Aparece su primer poemario titulado Ad Gloriam (Arteidea editores, 2006). Publica el trabajo de investigación: La historia de Salamanca de Monterrico (Grupo Editorial RAS, 2006 – 3 ediciones).
Obtiene 2ª mención honrosa en el concurso mundial de poesía erótica Bendito sea tu Cuerpo (2008). Aparece en el compilatorio del mismo nombre. Aparece su plaquette Sandra, (Maribelina editores, 2009). Publica su poemario temático Summer Screams(Hipocampo editores, 2009). El 2012 publica. Publica Historia de Sangallaya (Asociación Distrital Sangallaya, 2012). El año 2013 publica con Altazor editores su segunda novela Tigres de Papel. Publica la II edición de su novela Resplandor Púrpura, editada por G4eneration (2014), en Buenos Aires. Publica Salamanca Sixties Un estudio sobre el rock en la Clase Media de Lima, (Editorial Selección Gallera 2014). Publica su novela Los Stones, (Animal Literario, 2016).
Publica Song From Lima, poesía, (Korriente A editores, 2017). Publica el trabajo de investigación Wanka Rock, historia del rock en Huancayo de 1959-1979, Korriente A editores (2017) con una reimpresión de Sonidos Latentes Producciones ese mismo año. Dirige el equipo técnico para la elaboración de el Plan Municipal de La Lectura y el Libro de la Municipalidad Provincial de Cusco, 2017. En 2018 publica tres ediciones de Manco Inca y la gran guerra de reconquista (Grupo Editorial RAS, Raymi Editores, Zafiro Editores). Con tres ediciones agotadas en menos de tres meses. El libro fue el segundo más vendido de la Feria Internacional del libro de Cusco.
Ha aparecido en 20 compilados de poesía a nivel mundial, incluye traducciones al francés y portugués de su obra. Ha sido columnista del diario Extra, y del Diario del PaísDiario del Cusco, Diario El Sol del Cusco. Además de las revistas digitales Punto de EncuentroMain Neim, Cronopio, etc., a nivel nacional e internacional. Ha sido conductor del programa El Rincón de Los Incomprendidos por HCM Tv radio, y de Palabra x Palabra por HCM Tv radio. Ha editado más de 20 libros con su sello RAS. Es en la actualidad columnista del semanario Qosqo Times y editor periodístico de la revista Open Cusco, de distribución gratuita en Lima y la Ciudad Imperial.
Síguelo en: https://www.facebook.com/franciscoleonescritor/

[1] Dios que habla.

[2] Fuente: http://www.shrisitaram.org/SpanishR/Ramayana%20parte%202.pdf. P. 614.