G.W. Yichang, importadora exclusiva de la bodega Catena Zapata, también maneja el proyecto que Laura Catena bautizó con el nombre de su primogénito: «Luca»
En 1997, Laura Catena, médica y bióloga egresada de Stanford y Harvard, se unió a la bodega Catena Zapata como Directora de Investigación. Un poco más de una década atrás, se encontraba entre San Francisco (EEUU) practicando y enseñando medicina de emergencia y en Mendoza (Argentina) trabajando en la bodega familiar. «Sentí el llamado de mi país. Los vinos argentinos eran desconocidos alrededor del mundo. Aprendí sobre los 500 años de su historia y noté que había todo por descubrir. Me dispuse a desafiar y romper reglas para hacer vinos que pudieran brillar», nos cuenta.
«En febrero de 1998, me encontré con uno de los vitivinicultores de mi trabajo, y nos detuvimos para visitar un viñedo en el distrito de La Consulta, en el Valle de Uco; donde sabía que había varios pequeños viñedos familiares de vides viejas de Malbec. Conocimos al dueño, quien orgullosamente dijo que él era la única persona mayor de 100 años en esa región, y amablemente nos ofreció un mate (tradicional té argentino compartido en reuniones sociales)», agrega Laura.
Cuando Catena se dio cuenta de que las uvas provenientes de este magnífico viñedo de 80 años estaban siendo vendidas para granel, decidió hacer un vino que honre los exquisitos sabores de esas viejas vides. «En 1999, lanzamos la primera añada de Luca a fin de explorar la calidad potencial de pequeñas viñas familiares antiguas, ubicadas en el Valle de Uco, Mendoza. Elegir el nombre fue fácil, pues va en honor a mi hijo».
En ese momento, muy pocos viticultores argentinos creían que podría elaborarse un vino grandioso con uvas compradas. Los productores de uva desconfiaban de las grandes bodegas y ellas, por su parte, no pensaban que ellos podían ser persuadidos para reducir su rendimiento y priorizar la calidad por sobre la cantidad; lo que era necesario para lograr vinos de alta gama. «Luego de reunirme con muchos de estos productores multigeneracionales, escuchar las historias apasionantes sobre sus familias y cómo sobrevivieron en tiempos económicos complejos, y degustar uvas extraordinarias; me convencí de que podría elaborar vinos grandiosos procedentes de estos pequeños viñedos familiares», revela.
No fue nada fácil al principio, porque la confianza nunca lo es. La reducción en el rendimiento que los vinos requerían estaba más allá de lo que los productores podían imaginar. Pero, veinte años después, Laura Catena puede afirmar con total confianza que quienes trabajan de la mano con ella se consideran parte de «Luca». Incluso, la cresta que figura en la etiqueta pertenece a la familia de su esposo Dan McDermott.
Cabe resaltar que algunos hechos que destacan deeste proyecto son: primera bodega argentina en embotellar Malbec de vides antiguas, pioneros en trabajar con pequeños viñedos familiares, primeros Pinot Noir & Chardonnay de altura extrema cultivados de forma orgánica en el Valle de Uco, la selección masal de Syrah más antigua de Argentina, traída en 1955 del Valle del Ródano, tres veces en la lista Top 100 de Wine Spectator (2008, 2014 y 2021), dos veces en la lista Top 100 de Wine Enthusiast (2018 y 2020) y la Certificación de Sustentabilidad otorgada por Bodegas de Argentina.
Recientemente, la prestigiosa publicación Wine Spectator incluyó a la cosecha 2019 de Luca Old Vine Malbec entre sus 100 vinos Top en el puesto #21. Por ello, si deseas degustar estos vinos tan exitosos provenientes de Argentina, puedes hacerlo desde la página web https://wineconcierge.pe/. Asimismo, encuentras información adicional en el enlace oficial www.lucawines.com y en redes sociales (@lucawines).
Escribe: Valeria Burga (@valeria.burga26)
Editora General
