La tierra tiembla con el estreno de «Oppenheimer», película basada en la vida del padre de la bomba atómica: Julius Robert Oppenheimer. El cual también toma inspiración en un libro ganador del premio Pulitzer. Conoce más detalles.
La conciencia a veces puede ser una tortura. Christopher Nolan le brinda 180 minutos al físico judío estadounidense que durante los eventos de la II Guerra Mundial diseñó el programa de armas nucleares y desencadenó el lanzamiento de dos bombas atómicas en las ciudades japonesas Hiroshima y Nagasaki. Y en una filmografía pródiga en envolturas fantásticas y saltos temporales, tipo Inception, Interestellar y la trilogía de Batman, a menudo incidiendo en la memoria perdida y la perturbación psíquica, como en Insomnia, Memento y su ópera prima Following, lo apretuja en uno de los relatos de mayor linealidad y angustia verídica que ha dirigido. Oppenheimer es un alma intrigada que ha merodeado por la película, primero cuál explorador ansioso, luego heraldo negro y finalmente deudo de su propio talento, atrincherado por fantasmas introspectivos y ajenos que están indistinta y alternadamente a su favor o en contra.
Nolan, totalmente inspirado, muestra a su personaje en varias trayectorias paralelas, entrecortadas y revisadas desde el futuro retrospectivo, ingrato y oscuro, en medio del zigzag profesional y amoroso, la investigación de átomos, neutrones, elementos y compuestos; el roce receloso con sus colegas, piruetas políticas, pragmatismos ideológicos, el liderazgo en la base de Los Álamos, el espanto posterior. ¿Y de qué manera lo graba? Concentrado en la figura introspectiva de Cillian Murphy, paulatinamente pálida y consumida, rodeada de encierros, grandes planos generales, penumbras, desenfoques y blancuras que obnubilan la vista y deforman los cuerpos de los involucrados en las intrigas del poder, representando que también se exponen a los efectos de la radiactividad. Los hallazgos de la élite del conocimiento se insertan en forma de latigazos escarlatas de microscopio, en una carrera contra el reloj, la paz y la vocación humanista. El ritmo es vertiginoso y los diálogos son abundantes.
Pero, ¿en qué material se ha apoyado Nolan para construir la historia de un personaje tan determinante? Pues bien, Nolan toma como punto de origen Prometeo americano: El triunfo y la tragedia de J. Robert Oppenheimer, la biografía a cargo de Kai Bird y Martin J. Sherwin que fue publicada en el año 2005. Esta novela de no ficción no se centra exclusivamente en el proceso de construcción de la bomba atómica por parte de Oppenheimer y el resto del equipo del llamado Proyecto Manhattan, sino también en lo que aconteció al físico una vez comprobó el alcance destructivo de su propia creación.
“Oppenheimer” ya se encuentra disponible en todas las salas de cine a nivel nacional con una historia inquietante, un cast de lujo y un mensaje más que histórico.
Escribe: Samuel Hurtado Cárdenas (@cinesamu)