¿Y si te dijéramos que una simple bolita de carbón con una semilla dentro podría solucionar los problemas de deforestación? Seedballs Kenya creó este maravilloso método y te contamos todo sobre él.

Calentamiento global, polución, deforestación. No es secreto el deterioro que estos factores están causando en nuestro planeta. La falta de áreas verdes y la inconsciencia de algunos negocios al momento de utilizar la tierra es una verdad en cada rincón del planeta. Sin embargo, muchas personas y empresas se encuentran en constante búsqueda de generar un cambio y, aunque sea de forma pequeña, aportan su granito de arena para contrarrestar esta realidad tan importante. Cookswell Jikos y Chardust Ltd son dos empresas comprometidas con los problemas medioambientales que unieron fuerzas para hacer realidad una idea brillante: Seedballs Kenya. Desde el 2016, este negocio ha desarrollado un método simple, de bajo costo, altamente eficiente de plantación de árboles y regeneración de bosques.
¿De qué trata este método? El producto en sí es tal y lo que el nombre indica «Seedball» o bola de semilla. La estructura consiste en una semilla de plantas autóctonas recubierta por una capa de polvo de carbón mezclado con algunos aglutinantes nutritivos. Este revestimiento de biocarbón ayuda a proteger la semilla de depredadores como roedores, insectos, pájaros y de temperaturas extremas hasta que llegan las lluvias. Luego, al retener el agua, la bola podrá prolongar un ambiente húmedo alrededor de la semilla para estimular la germinación.

Todas las semillas utilizadas están certificadas por el Kenyan Forestry Research Institute (KEFRI) como semillas de árboles autóctonos. Esto con el fin de no alterar el ecosistema del país. Además, la producción y distribución de las Seedballs presentan características 100% sostenibles y amigables con el medio ambiente. En primer lugar, el producto es natural y libre de transgénicos en su totalidad. Las semillas utilizadas provienen del Centro de Semillas Forestales de Kenia, el cual cuenta con aproximadamente 220 especies de árboles originarios de 600 localidades distintas. Así, con esta información, Seedballs Kenya puede orientar al distribuidor sobre qué semillas utilizar según la región.
Por otro lado, el proceso de recubrimiento utiliza polvo de carbón natural recuperado de residuos de carbón vegetal desechado, un subproducto de la industria que en sí es un motor de deforestación. De esta manera, pueden ofrecer las Seedballs a la empresa y contribuir a una reforestación sostenible de estas áreas. Utilizan embalajes reciclados, apoyando a pequeños negocios locales y se abastecen de todas las bolsas de papel y materiales de embalaje a nivel local. Adicionalmente, manejan únicamente marketing online con el fin de reducir el consumo de papel. Por último, el proceso de fabricación es bajo en consumo energético y libre de combustibles fósiles, convirtiéndolo en una fabricación baja en carbono.

Distintas iniciativas de reforestación dirigidas por ONG, escuelas, organizaciones locales y comunidades utilizan Seedballs Kenya como producto por distintas razones. Además de ser económicas, las Seedballs no requieren labranza de los suelos y pueden ser distribuídas en cualquier época del año. Esta increíble iniciativa descubre puertas a una nueva forma de reforestación y plantea una solución a cualquier tipo de excusa. Incluso sirve de ejemplo a otros países, los cuales podrían contribuir al cuidado de nuestro planeta con este mismo método. Esperemos que Seedballs Kenya abra los ojos al mundo y deje claro que mantener una tierra verde es mantener una tierra sana.
Escribe: Arianne Giralt (@ariannegiralt)