Tacama ha trazado sus planes para el comienzo del año. En el mes de marzo llegará «Toñuz», el nuevo vino de la firma que promete desmarcarse del resto con dos tipos de uva sumamente particulares. 

En el sector vitivinícola, las tendencias también son importantes. Ello ha sido fundamental para Tacama, pues llegó el momento perfecto de concretar uno de sus sueños a través del vino «Toñuz», altamente diferenciador y un desafío para los paladares más exigentes. ¿Por qué se considera un reto? Este producto puede definirse como un «blend» que une dos mundos: el de las uvas patrimoniales, que tradicionalmente han sido utilizadas solo para elaborar Pisco; y el de las variedades europeas, introducidas en el Perú durante el siglo XX.  De esta manera, es un símbolo de la unión entre la uva Quebranta y de la Tannat de origen francés.

«Toñuz» está dirigido para quienes optan por probar cosas nuevas, que buscan algo diferente, que se atreven al cambio. Agradable y fácil de tomar, se convierte en un vino apto para los consumidores más osados», explica Mariela Gutelli, gerenta de marketing de Tacama. La Quebranta y la Tannat se vendimian, procesan y vinifican por separado. Luego, se realiza la mezcla de las dos en proporciones adecuadas para cumplir el objetivo: un vino afrutado, suave, con cierta ligereza.

«La primera es considerada como la más emblemática de las uvas pisqueras. Por ello, queremos mostrar que se puede elaborar un buen vino con ella. La otra se encarga de brindar frutas negras, color y algo de estructura», afirma Frédéric Thibaut, enólogo de la firma.

Cabe resaltar que Toñuz es un arbusto que crece en la viña Tacama y, el resto, en Ica. En el valle lo consideran como promotor de bienestar y un efectivo talismán contra hechizos y conjuros. «Decidimos denominar de esta manera a este primer ensamblaje, con la certeza de que le brindará, a quien lo beba, los placeres únicos de una gran conexión, y que recibirá una mágica protección», sostiene Gutelli

Por si fuera poco, su presentación es exquisita. «La etiqueta representa la armonía de las uvas y, por ello, aparecen las dos cepas entrelazadas. Son vides que se juntan para darnos sus mejores frutos y un gran vino», añade. El color chocolate de fondo simboliza el tono de la tierra, de los troncos de las cepas y de la madera del árbol en cuestión. En la parte baja está el aval de la marca. Es importante destacar que, en esta primera edición, se producirán solo 21,000 botellas. Inicialmente estará en el mercado nacional, pero luego aspira a conquistar el resto del mundo. 

Tiene un matiz de color carmesí con reflejos vivos y brillantes. Sus notas frutales rememoran los frutos del bosque así como los frutos negros. Posee una nota mentolada y, ya en copa, se perciben las puntadas de especias como la canela. Su ingreso en el paladar es amable, de taninos medios y buena acidez. Lo que buscan con este vino es el equilibrio. Por supuesto que el maridaje es esencial con cualquier tipo de vino. Puede ser un adobo de cerdo, pues concentra sabores intensos, especiados, únicos. El corte recomendado es el brazuelo, bajo una cocción a fuego lento y acompañado de un cremoso puré de pallares verdes. «Toñuz» elevará la experiencia de este plato. 

Otra alternativa para maridar es el asado de tira en salsa Teriyaki, la cual aporta textura, notas saladas y ligeros toques dulces. Dicho corte concentra un buen sabor, cocinado a las brasas, con pinceladas ahumadas. Hay que acompañar el platillo con un mix de verduras a la parrilla: berenjenas, pimientos morrones, champiñones, cebollas Charlotte y tomates cherry. De complejidad aromática y correcta acidez, este vino logrará el balance siempre que esté a una temperatura entre los 16 y 18 °C.

Después de todos los detalles que expusimos sobre el nuevo ejemplar, te estarás preguntando cómo obtenerlo. Puedes realizar tus pedidos vía WhatsApp (Lima: +51 913 090 43 / Ica : +51 981 147 078) o por la web de Tacama. Para más información, visita www.tacama.com y consulta su página oficial en Facebook e Instagram (@tacama_oficial). Te recomendamos que, en la época veraniega, coloques la botella en la parte baja de la refrigeradora durante 20 o 30 minutos. Un sacacorchos, una copa y listo.

Escribe: Valeria Burga (@valeria.burga26)

Editora General